martes, 22 de enero de 2013

¿Porqué apadrinar un árbol de mango de la Axarquía?

     La respuesta a esta pregunta, para, que durante la semana no dejo de pensar "mis" árboles, es obvia. 

      Los motivos que a mí me empujarían a apadrinar un árbol estarían relacionadas con el sentimiento de comunión con la naturaleza, la confianza en la calidad, frescura y pureza de la fruta que se recoge. No es comparable una pieza de fruta comprada en un supermercado a la que recoges de "tús" árboles. Y cuando no existe la posibilidad física de tenerlos, ya sea por que no tenemos una parcela, un jardín u otro lugar para poder plantarlos. O por que el clima no es el adecuado en nuestro lugar de residencia, el apadrinamiento es la solución a este problema. 

 El padrino o padrinos, si apadrina una familia,  reciben información periódica del estado y evolución de su árbol, bien sea mediante comentarios, fotografías o vídeos dependiendo del momento del año en el que estemos y de las prácticas que se le hagan a la plantación ( cavas, podas, limpiezas, tratamientos, etc), incluso del estado del tiempo y como influye este en el desarrollo de los árboles.

Luego reciben en su domicilio toda la fruta que haya producido su árbol o árboles, completando hasta los 14kg  si ste no llega a esta cantidad.

En nuestro caso también ofrecemos  la posibilidad de recoger la fruta en persona, si así lo quieren  los padrinos disfrutando de un fin de semana en nuestra casa de campo.
 





sábado, 19 de enero de 2013

El producto de nuestro trabajo

Los frutos

     Todo trabajo persigue una recompensa. Los que amamos la naturaleza y regamos el campo con nuestro sudor y esfuerzo, obtenemos esa recompensa en forma de frutos que consumir y compartir con nuestros familiares y amigos. Ya sé que todo el mundo no siente el mismo apego por la tierra, todos no podemos ser iguales, pero cuando tienes el sentimiento de que un almendro, un naranjo o una vid son tuyos  la cosa cambia, lo ves de otra forma.

     Os pongo como ejemplo está vid de uva moscatel con sus racimos recien cuajados,  preparados para dar una uva de un sabor espectacular, dulce intenso si la comes tal cual, o transformada en la famosa "uva pasa" o en el más famoso Vino dulce de Málaga.
     
     Racimos como el que os presento a continuación,  resultado de todo el trabajo previo que se ha tenido que llevar a cabo para conseguir el objetivo deseado
 
      Recuerdo el primer año, año 2004,  que adquirimos la finca y que por aquel entonces era todo un viñedo de la citada uva moscatel.
 
No puedo negar que  jamás de los jamases podia haberme imaginado lo que cuesta producir un racimo de uva.  Cuento esto con la esperanza de que la próxima vez que tengáis una uva o cualquier otra fruta en vuestras manos sepais valorar el trabajo y el esfuerzo que se necesita para "criarla".   

Febrero de 2004, la fecha ideal para empezar con todo lo que hay que hacerle a una vid. Empezamos por la poda,  para recortar todas las ramas del año anterior pues la vid "cuaja" los racimos en las nuevas.
Tenemos que retirar los restos  de la poda para que no dificulten el paso al caminar por el viñedo. En esta zona todo el mundo suele deshacerse de los restos mediante quemas contraladas dentro de la misma parcela.
Después, hay que cavar la tierra removiendo con un buen azadon para oxigenar el terreno y que de esta forma absorva mejor la lluvia.  Por supuesto tenemos que fertilizar para aportar nutrientes a la planta, particularmente yo lo hago con estiércol de oveja que aporta materia orgánica, nitrogeno y es totalmente ecológico.  Podemos decir que estos son los trabajos más duros del proceso, pero no los únicos ya que nos queda, fumigar con azufre para proteger de los hongos como el mildiu que destruirían los racimos (tendremos que hacerlo varias veces dependiendo de si el clima es húmedo o seco, si es húmedo los hongos proliferan mejor y tenemos que aplicar azufre más veces). Otra cosa que tenemos que hacer es seleccionar  los racimos que más nos gusten antes del cuajado para conseguir uvas de un tamaño apropiado. Y si todo ha ido bien solo nos quedaría la recolección como premio los "malos ratos" pasados.

A continuación os presento otras frutas que obtenemos en "La Luna"

Naranja 
Almendra
Aceituna



Aguacate

Chirimoya 
Limón

Mango Osteen
 
 
 

 

viernes, 18 de enero de 2013

El entorno


Vélez-Málaga capital de la Comarca de la Axarquía

     La Axarquía, comarca de la zona oriental de  Málaga, provincia de Andalucía (España), enclave singular por su microclima subtropical, protegida por las montañas de las Sierras de Tejeda y Almijara y acariciada por el mar Mediterraneo.

     Vélez-Málaga es una de las poblaciones más importantes de la provincia, con pretensiones de capitalidad, que en mi opinión, y aunque es mi pueblo, donde nací y he vivido siempre y quiero seguir viviendo, le "falta un hervor" como se diría en castizo. 
     Tenemos un clima envidiable, el mar y la montaña a tiro de piedra y lugares de una belleza incomparable que invito a que quien quiera y pueda no dude en visitar. Lugares que en próxima entradas iré compartiendo con todo el que lea estas lineas.
     

     Ahora me gustaría centrarme en el entorno de la finca "La Luna", donde tenemos la plantación de mangos, aguacates, chirimoyos, almendros, limoneros, naranjos, etc.  La casa es pequeña pero acogedora, con una piscina muy  bonita que se asoma a los pueblos de la Axarquía occidental como son Iznate, Almachar, Cútar y Comáres (cito los que son visibles desde el mirador).

  



   Situada a 9 km del centro de Vélez, debemos tomar la carretera A-356 dirección Pantano de la Viñuela, desviarnos en el cruce de la barriada de El Trapiche por la MA-145 y justo frente al Aeropuerto de la Axarquía tomar dirección a la Torre de la Atalaya y la Estupa del Centro budista Karma guen . Dos lugares emblemáticos por su singularidad, belleza y espectaculares vistas de toda la comarca, tanto de todo el valle de Vélez, como de la Sierra Tejeda, el pantano de la Viñuela, etc. El enclave es idoneo para la práctica del senderismo y la bicicleta de montaña. Por esta zona se celebra una  prueba ciclista MTB  denominada "El desafío del Buda".
Desde nuestra finca se pueden visitar dando un agradable paseo.  Y ya que estamos aquí tenemos a un paso el Pantano de la Viñuela y varios pueblos del norte de la Axarquía.

 








     



 

lunes, 14 de enero de 2013

El comienzo

Hola

Esta es la primera entrada del blog. Supone el nacimiento de un proyecto que he tardado mucho tiempo en poner en marcha pero que por fin creo que estoy en condiciones de llevar a cabo.

Mango bravio recién plantado (mayo 2004)
  Todo empieza hace 9 años, con la plantación de este primer pequeño mango, sin muchos conocimientos, pero con la gran ilusión de verlo crecer y dar buenos frutos.

     Al que siguieron 199 más, sembrados ese mismo día y otros 200 al año siguiente. 

Mangos protegidos con tela plástica.



     La plantación la realizamos a 4x4 metros de distancia, con sistema de riego con goteo en tubo de polietileno de 18mm y goteros autocompensados de 8 litros la hora. 

     Como erán tan pequeñitos fue muy fácil sembrarlos mediante una barra metálica a la que soldamos en un extremo un apéndice de metal con la misma forma que el cepellón  del arbolito.
     Los primeros años el clima no acompañó mucho, ya que tuvimos una fuerte sequía y hubo que controlar mucho el riego, pero pasado 4 años ya empezamos a obtener frutos tal y como se puede ver en la siguiente fotografía.

     Como todavía no estaban muy fuertes tuvimos que ayudarlos con cañas para que pudiesen soportar el peso de la fruta, ya que como se puede observar, el peso de la fruta de mango es considerable y se corre el riesgo de que se quiebre la rama entera.

     Una vez que el arbol es adulto este problema ya no suele darse, como se puede ver a continuacion.